De manera remota por zoom y con 86 imputados, Cristina Fernández fue acusada como jefa de una asociación ilícita y cohecho. También están ex funcionarios de la administración kirchnerista, el remisero Centeno y encumbrados empresarios como Enrique Pescarmona y Aldo Roggio.
Este jueves se celebró la primera audiencia del juicio oral de la causa denominada «Cuadernos de las coimas». El debate se prolongó por espacio de cuatro horas y continuará próximo jueves,
La expresidenta Cristina Fernández, participó desde su casa de San Jose 1111 del barrio de Constitución, según el requerimiento que hizo el juez Enrique Méndez Signori, quien en un momento reclamó que «todos los acusados» pongan la cámara. «No todos aparecen en cámara, es deber del tribunal velar por que esta lectura se haga en presencia de los imputados», dijo el magistrado obligando así a que la totalidad de los imputados habiliten la cámara y pudiera vérselos.
Cristina Fernández de Kirchner es juzgada en esta causa como «supuesta jefa de asociación ilícita y cohecho». También están acusados otros 86, entre ellos exministros de su gobierno, el remisero Oscar Centeno y medio centenar de empresarios.
La audiencia inició con la lectura del requerimiento de elevación a juicio del fiscal que instruyó el caso, Carlos Stornelli. En la eumeración se mencionaron los 40 casos donde presuntamente hubo sobornos de parte de empresarios y sobre los cuales se considera a la expresidenta coautora «en su carácter de beneficiaria final» de esas coimas.
Los jueces Méndez Signori, Fernando Canero y Germán Castelli se conectaron desde una sala de audiencias del Palacio de Justicia en Talcahuano 550, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Cristina Fernández participó desde su domicilio junto a Carlos Beraldi, su abogado defensor. Allí cumple arresto domiciliario de seis años por administración fraudulenta en el caso Vialidad.


