La investigación policial permitió detener al supuesto autor del homicidio de Guillermo Oviedo, encontrado muerto en su casa de barrio Obrero. El detenido fue identificado como Guillermo Rodríguez (59), quien fue aprehendido cuando circulaba en bicicleta por Perón Este y Sarratea. Habría conocido a la víctima desde hace varios años, cuando compartieron condena en la cárcel local.
Viejos conocidos
Tanto Oviedo como Rodríguez eran viejos conocidos, según revelaron veteranos efectivos de la fuerza de seguridad. Fuentes judiciales consultadas repararon en la cantidad de antecedentes acumulados por la víctima y el imputado, quienes fueron compañeros de artimañas en el mundo del hampa y hasta llegaron a compartir celda en la cárcel local.
Entre los frondosos antecedentes delictivos de Oviedo, que incluye tres homicidios previos, resurgió ayer el crimen de una mujer de 27 años ocurrido en abril de 2007, en una vivienda de barrio Obrero en medio de una venganza por el ataque a un joven. También ha sido acusado de abuso sexual en la cárcel, así como de robo y otros delitos.
Sobre el caso de antenoche, los investigadores desconocen cuáles pudieron ser los motivos que llevaron a Rodríguez a cometer el noveno homicidio de 2019 en la ciudad. “Así como se conocían desde hacía muchos años, también habría viejos rencores”, reconoció uno de los sabuesos.
Una hipótesis que rápidamente descartaron fue la del robo. Esto lo afirmó el jefe de la Departamental Río Cuarto, Walter Huerta. El comisario mayor precisó que en la escena del crimen no había signos de desorden ni faltante de algún elemento, más allá de la precariedad de la vivienda.
Huerta, el jefe de Investigaciones, Gustavo Della Mea, y el subjefe de la División, Juan Gatica, siguieron de cerca junto con las autoridades de la Comisaría Alberdi los procedimientos realizados ayer. Hasta las 18.30 los funcionarios permanecieron en esa dependencia policial, cuyo personal efectuó al menos tres allanamientos, en los que secuestraron material probatorio para la causa, y las tareas continuarán con la intención de encontrar el arma homicida.
Oviedo tenía cuatro hijos, pero vivía solo en la casa de calle Catamarca, donde lo encontró muerto “Loly”, su hermana de 38 años.