El expresidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva sufrió un nuevo revés en el Supremo Tribunal Federal. Como esa corte decidió postergar hasta la semana próxima el debate sobre la constitucionalidad de arrestar a los condenados en segunda instancia, el político deberá pasar toda la semana preso.
El Tribunal Regional Federal 4, de segunda instancia, condenó a 12 años y un mes de prisión a Lula por corrupción y lavado de dinero en la causa Lava Jato.
La decisión de no debatir la constitucionalidad fue adoptada por el juez del Supremo, Marco Aurelio Mello, que presentará el tema la próxima semana.
Existe una división entre los 11 miembros del Supremo, donde cinco jueces apoyan que los condenados en segunda instancia sigan presos y otros cinco se oponen, mientras la jueza Rosa Weber expresó posiciones cambiantes. Marco Aurelio Mello es el vocero de quienes rechazan la prisión en segunda instancia, lo que favorece a Lula, y choca con la presidenta del Supremo, Carmen Lucia Antunes.