La Justicia confirmó que Sergio Medina irá a juicio por el crimen de la comerciante Claudia Muñoz, ocurrido en mayo de 2017 en su negocio de la calle San Martín. Medina, único imputado en la causa, fue señalado por el fiscal Moine por aparecer en registros de las cámaras de seguridad de la zona, momentos antes de ocurrir el asesinato.
La defensa de Medina, encabezada por el penalista cordobés Carlos Hairabedián, se había opuesto a la elevación a juicio.
El principal argumento era que el magistrado no tenía elementos sólidos que ubiquen al acusado en el lugar y momento del homicidio, sino apenas algunos indicios.
Ahora, el juez de Control subrogante, Gustavo Echenique, rechazó el planteo de la defensa.
Sin embargo, Hairabedián podrá apelar a una segunda instancia para plantear que la instrucción del crimen es deficiente y que por tanto no amerita llegar a la última instancia del proceso penal. En este sentido, ahora la defensa podría apelar ante la Cámara Segunda del Crimen de los Tribunales riocuartenses.
La causa
Sergio Medina, el albañil de 48 años oriundo de Las Albahacas, fue detenido cuando habían pasado semanas del crimen de Claudia, pero recobró la libertad por algunos días cuando el entonces juez de Control y Garantías Daniel Muñoz ordenó que se siguiera investigando el hecho con Medina libre.
Para el juez el cuadro probatorio era endeble. Por eso el 4 de octubre de 2017 recuperó la libertad. Pero un mes después, la Cámara Segunda de Apelaciones avalaba la investigación y Medina volvió a la cárcel.
Para la Justicia, el indicio de presencia del albañil en la escena del crimen es fuerte y a eso le sumaron “indicios de mala justificación”, porque no fue consistente cuando intentó explicar su presencia en la zona.