La internacional Trafigura, que estaba interesada en comprar Oil Combustibles, desistió de su oferta inicial luego de que el juez Javier Cosentino le pidiera ratificar el interés.
Ante la respuesta negativa de la empresa, todo se encamina a la quiebra de Oil. Cosentino tiene tiempo hasta el jueves para decretarla, si es que antes no aparece ningún otro oferente.
Después que los interventores judiciales manifestaron sus dudas sobre la solvencia y liquidez de Trafigura, el juez a cargo del concurso de acreedores de Oil Combustibles pidió que el trader extranjero brindara certezas sobre cómo se haría cargo de la petrolera de López, nuevamente detenido por defraudación.
La respuesta llegó en 48 horas, el plazo establecido por el juzgado. Allí, Trafigura manifestó que eran de imposible cumplimiento los plazos estipulados por la AFIP para cancelar una deuda millonaria.
A la fecha, la AFIP le reclama a Oil una deuda preconcursal superior a 19.000 millones de pesos, contabilizando intereses y punitorios.
La deuda original era de 8.000 millones de pesos, y la justicia aseguró que con dichos fondos el empresario financió su holding y adquirió nuevas compañías, entre ellas los medios de comunicación, hoy con concursos preventivos abiertos.
Ese monto que no se tributó y que derivó en la causa penal puede pagarse en un máximo de doce cuotas. Pero como la maniobra de dejar de pagar el tributo se repitió después de abierto el concurso, la nueva deuda superior a 1.680 millones de pesos sólo podrá pagarse en una única cuota.
Ante semejante panorama, el juez Cosentino pidió garantías y certezas financieras a Trafigura, la empresa que se anotó para evitar la quiebra de Oil.
Hoy la firma informó que desistió de la compra de la petrolera de Cristóbal López, ya que había pedido un plan de cuotas más extenso para cancelar las deudas con la AFIP. Pero como la empresa es investigada por fraude, no se pueden otorgar 96 cuotas, el fisco sólo accedió a dar doce meses como máximo para pagar toda la deuda.
Ante dicho escenario, Trafigura señaló que “resulta imposible que pueda abonar o arribara un acuerdo de pago de las deudas fiscales y tributarias de Oil en las condiciones que las mentadas resoluciones internas de la AFIP establecen”.
Al retirarse de la oferta de adquirir Oil, también remarcó Trafigura que es “evidente la imposibilidad de obtener las conformidades que exige la normativa, con lo que la decisión de abandonar el proceso de cramdown iniciado resulta la única posibilidad racional desde el punto de vista económico”.
Ante la celeridad que impuso el juez Cosentino en el proceso para evitar la desvalorización de los activos, Trafigura concluyó: “Pongo en conocimiento que en este acto se desiste de la presentación efectuada y se pide su exclusión del registro de inscriptos en el proceso de salvataje”.
Entre otros aspectos, los representantes del trader señalaron que si bien tiene interés en salvaguardar los activos de Oil y participar en su adquisición, le resulta “imposible mantener el compromiso asumido ante los plazos impuestos por el fisco -el principal acreedor de la petrolera-, y que los mismos hacen inviable económicamente asumir el pago de las deudas pre concursales y post concursales”.